• Lo Ultimo

    Evangelio del día Domingo 16 abril 2023 - Juan 20, 19-31

    Evangelio del día Domingo 16 abril 

    PRIMERA LECTURA

    Lectura del libro de los Hechos de los apóstoles 2, 42-47

    Los hermanos perseveraban en la enseñanza de los apóstoles, en la comunión, en la fracción del pan y en las oraciones.

    Todo el mundo estaba impresionado, y los apóstoles hacían muchos prodigios y signos. Los creyentes vivían todos unidos y tenían todo en común; vendían posesiones y bienes y los repartían entre todos, según la necesidad de cada uno.

    Con perseverancia acudían a diario al templo con un mismo espíritu, partían el pan en las casas y tomaban el alimento con alegría y sencillez de corazón; alababan a Dios y eran bien vistos de todo el pueblo; y día tras día el Señor iba agregando a los que se iban salvando.



    SALMO

    Sal 117, 2-4. 13-15. 22-24
     R/. Dad gracias al Señor porque es bueno, porque es eterna su misericordia

    Diga la casa de Israel:

    eterna es su misericordia.

    Diga la casa de Aarón:

    eterna es su misericordia.

    Digan los fieles del Señor:

    eterna es su misericordia. R/.


    Empujaban y empujaban para derribarme,

    pero el Señor me ayudó;

    el Señor es mi fuerza y mi energía,

    él es mi salvación.

    Escuchad: hay cantos de victoria

    en las tiendas de los justos. R/.


    La piedra que desecharon los arquitectos

    es ahora la piedra angular.

    Es el Señor quien lo ha hecho,

    ha sido un milagro patente.

    Éste es el día que hizo el Señor:

    sea nuestra alegría y nuestro gozo. R/.



    SEGUNDA LECTURA

    Lectura de la primera carta del apóstol san Pedro 1, 3-9

    Bendito sea Dios, Padre de nuestro Señor, Jesucristo, que, por su gran misericordia, mediante la resurrección de Jesucristo de entre los muertos, nos ha regenerado para una esperanza viva; para una herencia incorruptible, intachable e inmarcesible, reservada en el cielo a vosotros, que, mediante la fe, estáis protegidos con la fuerza de Dios; para una salvación dispuesta a revelarse en el momento final.

    Por ello os alegráis, aunque ahora sea preciso padecer un Poco en pruebas diversas; así la autenticidad de vuestra fe, má preciosa que el oro, que, aunque es perecedero, se aquilata a fuego, merecerá premio, gloria y honor en la revelación de Jesucristo; sin haberlo visto lo amáis y, sin contemplarlo todavía, creéis en él y así os alegráis con un gozo inefable y radiante, alcanzando así la meta de vuestra fe: la salvación de vuestras almas.



    EVANGELIO DEL DIA

    Evangelio según San Juan 20, 19-31

    Al anochecer de aquel día, el primero de la semana, estaban los discípulos en una casa, con las puertas cerradas por miedo a los judíos. Y en esto entró Jesús, se puso en

    medio y les dijo:

    «Paz a vosotros».

    Y, diciendo esto, les enseñó las manos y el costado. Y los discípulos se llenaron de alegría al ver al Señor. Jesús repitió:

    «Paz a vosotros. Como el Padre me ha enviado, así también os envío yo».

    Y, dicho esto, sopló sobre ellos y les dijo:

    «Recibid el Espíritu Santo; a quienes les perdonéis los pecados, les quedan perdonados; a quienes se los retengáis, les quedan retenidos».

    Tomás, uno de los Doce, llamado el Mellizo, no estaba con ellos cuando vino Jesús. Y los otros discípulos le decían:

    «Hemos visto al Señor».

    Pero él les contestó:

    «Si no veo en sus manos la señal de los clavos, si no meto el dedo en el agujero de los clavos y no meto la mano en su costado, no lo creo».

    A los ocho días, estaban otra vez dentro los discípulos y Tomás con ellos. Llegó Jesús, estando cerradas las puertas, se puso en medio y dijo:

    «Paz a vosotros».

    Luego dijo a Tomás:

    «Trae tu dedo, aquí tienes mis manos; trae tu mano y métela en mi costado; y no seas incrédulo, sino creyente».

    Contestó Tomás:

    «Señor mío y Dios mío!».

    Jesús le dijo:

    «¿Porque me has visto has creído? Bienaventurados los que crean sin haber visto».

    Muchos otros signos, que no están escritos en este libro, hizo Jesús a la vista de los discípulos. Estos han sido escritos para que creáis que Jesús es el Mesías, el Hijo de Dios, y para que, creyendo, tengáis vida en su nombre.

      Palabra del Señor




    No hay comentarios

    Con la tecnología de Blogger.