Lecturas, Salmo y Evangelio de Hoy - Palabra de Fe Catolica

Evangelio Jueves 26 de Junio 2025 - Mateo 7,21-29

Lectura del día

Lectura del libro del Génesis 16, 1-12. 15-16

En aquellos días, Saray maltrató a Hagar, y ella se escapó.
El ángel del Señor la encontró junto a la fuente del desierto, la fuente del camino de Sur, y le dijo: «Hagar, esclava de Saray, ¿de dónde vienes y adónde vas?»
Ella respondió: «Vengo huyendo de mi señora.»
El ángel del Señor le dijo: «Vuelve a tu señora y sométete a ella.»
Y el ángel del Señor añadió: «Haré tan numerosa tu descendencia que no se podrá contar.»
Y el ángel del Señor concluyó: «Mira, estás encinta y darás a luz un hijo y lo llamarás Ismael, porque el Señor te ha escuchado en la aflicción. Será un potro salvaje: él contra todos y todos contra él; vivirá separado de sus hermanos.»
Hagar dio un hijo a Abrán, y Abrán llamó Ismael al hijo que le había dado Hagar. Abrán tenía ochenta y seis años cuando Hagar dio a luz a Ismael.

Salmo

Salmo 105,1-2.3-4a.4b-5
R/. Dad gracias al Señor porque es bueno

Dad gracias al Señor porque es bueno,
porque es eterna su misericordia.
¿Quién podrá contar las hazañas de Dios,
pregonar toda su alabanza? R/.

Dichosos los que respetan el derecho
y practican siempre la justicia.
Acuérdate de mí por amor a tu pueblo. R/.

Visítame con tu salvación:
para que vea la dicha de tus escogidos,
y me alegre con la alegría de tu pueblo,
y me gloríe con tu heredad. R/.

Evangelio del día

Evangelio según San Mateo 7,21-29

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «No todo el que me dice “Señor, Señor” entrará en el reino de cielos, sino el que cumple la voluntad de mi Padre que está en el cielo. Aquel día muchos dirán: “Señor, Señor, ¿no hemos profetizado en tu nombre, y en tu nombre echado demonios, y no hemos hecho en tu nombre muchos milagros?” Yo entonces les declararé: “Nunca os he conocido. Alejaos de mí, malvados.” El que escucha estas palabras mías y las pone en práctica se parece a aquel hombre prudente que edificó su casa sobre roca. Cayó la lluvia, salieron los ríos, soplaron los vientos y descargaron contra la casa; pero no se hundió porque estaba cimentada sobre roca. El que escucha estas palabras mías y no las pone en práctica se parece a aquel hombre necio que edificó su casa sobre arena. Cayó la lluvia, se salieron los ríos, soplaron los vientos y rompieron contra la casa, y se hundió totalmente.»
Al terminar Jesús este discurso, la gente estaba admirada de su enseñanza, porque les enseñaba con autoridad, y no como los escribas.
Palabra del Señor

Evangelio Jueves 26 de Junio 2025 - Mateo 7,21-29

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Reflexión para el Evangelio de Mateo 7,21-29

La lectura de Mateo 7,21-29 concluye el Sermón del Monte con una advertencia poderosa y una invitación a vivir la fe de manera auténtica. Jesús nos recuerda que no basta con decir "Señor, Señor" para entrar en el Reino de los Cielos; lo esencial es hacer la voluntad del Padre. Este pasaje nos desafía a examinar nuestra vida espiritual y a reflexionar sobre el verdadero significado de ser discípulos de Cristo.

Jesús comienza diciendo: "No todo el que me diga 'Señor, Señor' entrará en el Reino de los Cielos, sino el que haga la voluntad de mi Padre que está en los cielos". Esta afirmación subraya que la salvación no depende de palabras vacías ni de apariencias externas, sino de una relación profunda con Dios que se traduce en obras concretas. Luego sigue con un ejemplo impactante: muchos que realizaron milagros en su nombre serán rechazados si no hicieron la voluntad del Padre. Esto nos recuerda que incluso los dones espirituales o los logros religiosos no tienen valor si no están arraigados en la obediencia a Dios.

Finalmente, Jesús compara a quienes escuchan sus enseñanzas y las ponen en práctica con un hombre prudente que construye su casa sobre roca. Por el contrario, aquellos que ignoran sus palabras son como un hombre insensato que edifica sobre arena. Cuando llega la tormenta, solo la casa construida sobre roca permanece en pie. Este mensaje resalta la importancia de vivir según las enseñanzas de Jesús como fundamento sólido para nuestra vida.

Este pasaje tiene implicaciones profundas para nuestra vida cristiana. A continuación, exploramos algunas enseñanzas clave:

Hacer la voluntad del Padre
La voluntad de Dios no es algo abstracto o inalcanzable; está claramente revelada en el Evangelio: amar a Dios sobre todas las cosas y amar al prójimo como a nosotros mismos. Hacer su voluntad implica vivir en coherencia con estos mandamientos, priorizando la caridad, la justicia y la humildad. No se trata de cumplir rituales o normas de manera mecánica, sino de transformar nuestro corazón para que nuestras acciones reflejen el amor de Cristo.

Palabras sin obras no bastan
Jesús nos advierte que no podemos engañarnos pensando que el mero conocimiento o la profesión verbal de fe nos salvará. Muchas personas pueden hablar de Dios, asistir a la iglesia o incluso participar en ministerios, pero si su vida no está marcada por la conversión y el servicio, sus palabras carecen de valor. Somos llamados a ser doers de la Palabra, no solo oyentes (Santiago 1,22).

El juicio final
La imagen de aquellos que realizan milagros en nombre de Jesús pero son rechazados es escalofriante. Nos recuerda que incluso los dones espirituales y los éxitos apostólicos no garantizan la salvación si no están acompañados de una vida íntegra. Dios no juzga por los títulos o los logros humanos, sino por la sinceridad de nuestro corazón y nuestra fidelidad a su voluntad.

Construir sobre roca
La comparación entre la casa construida sobre roca y la edificada sobre arena ilustra la importancia de fundamentar nuestra vida en las enseñanzas de Jesús. Las tormentas de la vida (dificultades, tentaciones, sufrimientos) son inevitables, pero solo aquellos que viven según el Evangelio tendrán la fortaleza necesaria para resistirlas. La roca simboliza la verdad y la sabiduría de Cristo, que nos sostienen en medio de las pruebas.

La autoridad de Jesús
El texto concluye destacando la reacción de la multitud ante las enseñanzas de Jesús: "Porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como sus escribas". A diferencia de los maestros de su tiempo, que se basaban en tradiciones humanas, Jesús habla con la autoridad divina. Esto nos invita a confiar plenamente en su palabra y a dejar que guíe cada aspecto de nuestra vida.

NOTA : El Evangelio del día puede variar segun su pais por alguna celebracion local o Fiesta Patronal, etc.

El Evangelio aqui publicado se basa generalmente en el calendario liturgico del Vaticano, salvo algunas excepciones.